Siete operarios de la planta de procesamiento de Pesquera Santa Cruz fueron despedidos este miércoles, justo al finalizar su jornada laboral y en vísperas del feriado por Semana Santa. Entre los afectados se encuentra una mujer que es sostén de hogar, con varios años de antigüedad en la empresa.
La notificación llegó a través de telegramas entregados al cierre del día, generando sorpresa y angustia entre los trabajadores. Personal del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) se hizo presente en la planta para interiorizarse sobre las razones de los despidos, aunque, según informaron, no obtuvieron respuestas claras por parte de la empresa.
Diego Colman, secretario adjunto del STIA, expresó su preocupación y vinculó las cesantías a una posible represalia por la adhesión de los empleados al paro general convocado por la CGT el pasado 10 de abril, el cual tuvo una fuerte adhesión en la región. "Creemos que se trata de una medida antisindical", afirmó Colman en breve diálogo con Mar&Pesca, y anticipó que el sindicato presentará una denuncia formal ante la delegación local del Ministerio de Trabajo, exigiendo la reincorporación de los operarios.
Por su parte, desde la empresa justificaron los despidos argumentando "bajo rendimiento" por parte de los trabajadores cesanteados y aseguraron que los mismos fueron debidamente indemnizados. Además, informaron que para compensar estas bajas incorporarán a 20 empleados que ya se desempeñaron en la empresa en calidad de eventuales. "Estamos reforzando la producción de calamar, y necesitamos ajustar el equipo para responder a la demanda del mercado", señalaron ante la consulta de este portal.
El conflicto podría escalar en los próximos días, ya que el STIA sostiene que el despido de los trabajadores fue injustificado y al margen de que reciban su indemnización, será dificil que puedan reinsertarse en otra empresa ya que la situación en Puerto Deseado es crítica.