

Al parecer el barco factoría Tai-An, que tiene como puerto de asiento Ushuaia, navega en un mar de problemas: a la sospecha del presunto cambio de especies se supo que también se le acumulan varias denuncias por la comida que se prepara abordo y por malas condiciones de habitabilidad. Algunas de estas denuncias fueron efectuadas por los propios tripulantes y otras por inspectores de pesca, en este caso puntual por la negativa de la empresa armadora de otorgarles las mismas condiciones que la oficialidad.
En diálogo con Mar&Pesca el director Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera, Julián Suarez confirmó que existen denuncias por las condiciones en las que se encuentra el buque, y detalló que las mismas fueron efectuadas por inspectores de pesca.
“Estamos teniendo inconvenientes porque los inspectores están incómodos trabajando en un buque que no les garantiza las condiciones de habitabilidad, y ya se iniciaron sumarios por este tema”, indicó el funcionario nacional.
Además confirmó que existe una investigación en curso por pesca de juveniles de merluza negra. En ese contexto detalló que a la descarga del buque se hizo presente la comisión de merluza negra de manera excepcional porque el barco no tiene cuota de este especie. “Se labraron actas y se está analizando el porcentaje de juveniles de merluza negra que trajo a bordo, aunque no hay por el momento nada concluyente”, dijo ante la consulta de este portal.
A dique
A raíz de las denuncias por problemas de habitabilidad del Tai-An una fuente con acceso a la información contó que la firma armadora pidió un turno para dique en Puerto Belgrano. “El barco salió a una corta marea y después va a dique, hay muchas cosas para arreglar, es mucha gente a bordo, con muchos reclamos, en la descarga también había gente del SOMU por reclamos de faltas de pago y por la comida, se ve que la gente se queja de que hay mucha comida china y no están acostumbrados a ese menú”, comentó la fuente generosa.
Y mencionó para cerrar: “lamentablemente la persona que ahora está a cargo no tiene conocimiento de cómo se administra un barco, viene del rubro hotelero y de la compra y venta de divisas, seguramente pensó que todo se hacía con la misma lógica, pero los tripulantes necesitan que se atiendan las necesidades básicas, pago a tiempo, comida pulsuda para aguantar los trabajos y que el barco esté en condiciones” apuntó.