

Durante la última reunión del sector congelador tangonero en Vigo, los principales referentes empresariales, Eduardo Boiero, presidente de la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPECA), y Agustín de la Fuente, titular de la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), ofrecieron una mirada crítica sobre la situación actual del langostinero argentino.
Ambos coincidieron en la necesidad de mantener la unidad del sector, garantizar una pesquería rentable y ordenada, y reclamar políticas claras y actualizadas al Consejo Federal Pesquero, ante un régimen normativo que —según señalaron— se mantiene sin cambios desde 1988.
Reunión en Vigo: unidad y diagnóstico común
Boiero explicó que la reunión celebrada en Vigo tuvo el mismo espíritu que la realizada anteriormente en Buenos Aires.
“Buscamos mantener una unidad de criterio y una pesquería ordenada y rentable. Aprovechamos la presencia de muchos armadores en Vigo para reforzar el contacto y definir cómo queremos seguir funcionando en el futuro”, indicó.
El dirigente agregó que el sector ya trabaja con vistas a los acuerdos gremiales de fin de año, para “evitar los padecimientos que tuvimos anteriormente y poder firmar convenios previsibles que garanticen la continuidad laboral”.
Por su parte, De la Fuente remarcó que el contexto sigue siendo crítico. “Las condiciones estructurales no han cambiado. Más allá de acuerdos transitorios, necesitamos una agenda común que nos permita superar este momento y adaptarnos a un contexto global que no controlamos. La crisis del sector pesquero no ha terminado”, advirtió.
Pescar en el norte: una decisión histórica y no conflictiva
Consultados sobre la posibilidad de retrasar el inicio de la campaña o evitar la pesca en el norte, Boiero aclaró que el tema no formó parte de la agenda formal. “No es momento para discutir eso. Puede que individualmente alguna empresa lo haya planteado, pero no fue parte de la reunión. Históricamente hubo empresas que no pescaron en el norte, en la zona 41; no es algo nuevo. Cada compañía define su estrategia. En todo caso, será un tema a conversar más adelante, cuando estén cerrados los acuerdos gremiales”, explicó.
De la Fuente agregó que cualquier decisión de ese tipo debe darse en el marco de las condiciones acordadas con todas las partes. “Más allá de las posturas individuales, no somos quienes debemos proponer ese tipo de cambios. Lo importante es que el sector mantenga una coordinación público-privada responsable”, apuntó.
Más flexibilidad para producir
Uno de los principales reclamos del sector congelador es poder elaborar una mayor proporción de colas, un producto con alta demanda internacional. Boiero explicó: “Cuando pedimos pescar un poco más de cola no lo hacemos para perjudicar a nadie. Lo hacemos para mantener el trabajo, la continuidad de la flota y la rentabilidad. Cada empresa debería tener libertad para decidir con sus trabajadores qué producto elaborar.”
En ese sentido, el dirigente cuestionó las diferencias de trato entre flotas: “Los fresqueros tienen la libertad de hacer bloques que luego exportan, y nadie les impone restricciones sobre qué producto pueden elaborar. Nosotros pedimos la misma libertad. En el Consejo Federal Pesquero presentamos un recurso de reconsideración sobre el tema de las colas, porque entendemos que es una limitante sin sentido. Cada empresa sabe qué necesita producir para sostener su operación.”
De la Fuente respaldó el planteo y subrayó que el organismo debe asumir un rol más constructivo: “En tierra nadie te dice qué producto podés hacer. El Consejo debe acompañar la actividad económica, no solo administrar recursos. Debe entender la dinámica de la industria.”
Mercados en cambio y necesidad de adaptación
Ambos empresarios coincidieron en que el escenario internacional cambió sustancialmente. “En el Congreso de la FAO que se realiza antes de la feria Conxemar se habló del descenso en el consumo y de la necesidad de adaptarse a nuevos hábitos. Para salir al mundo y conseguir mayores mercados, primero tenemos que ordenar la pesquería que consideramos que realmente es lo que hace falta”, explicó Boiero.
De la Fuente agregó que el Consejo Federal Pesquero debe asumir un rol más activo. “El Consejo es estratégico. Así como en Europa se promueven espacios educativos para enseñar a consumir productos del mar, nosotros también debemos modernizarnos y mejorar nuestra gestión interna porque tenemos una agenda que al otro día nos está esperando”
Debate con el SOMU por la producción a bordo
Uno de los temas que generó debate fue la postura del SOMU, que se opone a que las empresas incrementen el porcentaje de colas procesadas a bordo. Boiero consideró que se trata de una diferencia de criterio laboral más que de una cuestión política o de gestión pesquera.
“Creo que el SOMU interpreta este tema como si a bordo se fueran a hacer tareas que hoy se realizan en tierra, como pelado o devenado, y no es así. Es un punto que debe discutirse dentro de cada empresa con sus trabajadores. No entiendo por qué el Consejo Federal Pesquero intervino en una cuestión que es propia de la relación laboral entre empresa y tripulación”, señaló.
El presidente de CAPECA pidió erradicar ese concepto erróneo de que sólo es trabajador aquel que se desempeña en la planta en tierra. “A veces se piensa que el único trabajador es el de planta en tierra, y no se reconoce que los buques también son fábricas donde trabajan argentinos con buenos salarios y que elaboran productos de alto valor agregado.”
De la Fuente coincidió en la necesidad de aplicar criterios de igualdad entre las distintas etapas de la cadena pesquera. “Cuando se habilitan los establecimientos exportadores, no se distingue entre los que están en tierra o en el mar. Todos forman parte del mismo sistema productivo. Por eso el sentido común debe prevalecer, y las normas deben adaptarse a la realidad de cada modalidad de trabajo”, subrayó.
Un llamado a políticas actualizadas
Ambos dirigentes coincidieron en un mensaje final: el régimen que regula la flota congeladora tiene más de tres décadas y ya no responde a la realidad actual: “Necesitamos reglas modernas, que acompañen la evolución del mercado y la tecnología. El Consejo debe ser parte de este proceso de cambio”, concluyó Boiero. (por Marina Pacheco).
Agustín de la Fuente y Eduardo Boiero en el Stand Mar Argentino en la feria de Conxemar, Vigo