El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, obispo de Gualeguaychú, escuchó hoy las inquietudes de las cámaras empresarias que integran el Consenso Pesquero Nacional (CPN), cuyos miembros advirtieron que el sector está sumido en una profunda crisis financiera, económica y social, que pone en peligro 40.000 puestos de trabajo en forma directa y otros 25.000 en forma indirecta.

El prelado dialogó por más de una hora en la sede episcopal, del barrio porteño de Retiro, con Oscar Fortunato (Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas), Celestino Negueruela (Cámara de Armadores de Poteros Argentinos), Guillermo Ferreira (Cámara de la Industria Pesquera Argentina) y Miguel Di Costanzo (Unión de Intereses Pesqueros Argentinos).

Tras escucharlos, monseñor Lozano dijo que ¨está situación me deja muy preocupado¨ y quedó a disposición de los representantes de las cámaras para futuros encuentros a fin de conocer como evoluciona la crisis. El lunes, los empresarios mantuvieron una reunión con el obispo de Mar del Plata, monseñor Antonio Marino, quien alentó a que se logren acuerdos que eviten profundizar la crisis.

Los empresarios trazaron un duro panorama del sector, en el que advirtieron que la industria vive una situación de quebranto, que no es nueva, y sostuvieron que "la crisis económica se está transformando, o ya lo es, en un grave problema social".

Precisaron que la emergencia social ya es visible en los puertos de Ushuaia, Deseado, Comodoro Rivadavia y Madryn, y comienza a golpear en las terminales de Mar del Plata, donde son innumerables los barcos parados.

También explicaron al prelado que la industria pesquera, netamente exportadora, padece desde hace al menos 4 años una situación de desprotección como consecuencia de una paridad cambiaria efectiva que no compensa los aumentos de costos de producción.

También se quejaron de que no son escuchados por las autoridades nacionales y que, tras mantener seis reuniones desde enero en una mesa interministerial, de la que también participan los gremios pesqueros, tanto los soluciones paliativas como las medidas de fondo "se dilatan en el tiempo o nunca llegan".

Preocupado

Tras escuchar a los empresarios pesqueros, monseñor Lozano dijo que "está situación me deja muy preocupado" y quedó a disposición de los representantes de las cámaras para futuros encuentros, a fin de conocer como evoluciona la crisis.

El titular de la Pastoral Social dijo, además, que se pondrá en contacto con los demás obispos de la comisión y con aquellos diocesanos donde emerge esta problemática, a fin de ponerlos al tanto.